
Bueno... ayer finalmente salí, a pesar de que llovía.
Hice unas cuantas fotos.....¡SIN SALIR DEL COCHE!!, je, je
Pero eso me sacudió la mandritis. Vi un motivo suficientemente interesante e intenté la fotografía, pero como estaba muy próximo a una panadería-pastelería, cada vez que, debajo del paraguas, tenía trípode y cámara a punto, venía algún gracioso a buscar el pan y se aparcaba, con los intermitentes de emergencia, justo detrás de lo que yo intentaba fotografiar.!
Me quedé con las ganas, recogí todo y me fui para casa, pero cuando faltaba apenas un cuarto de hora para medianoche volví de nuevo a aquel sitio.
Ahora si que nadie me molestó, si esceptuamos a la patrulla de la policía local, que se acercó curiosa a ver quién era el loco que a esas horas rondaba en esa esquina con un trípode y cámara plantado debajo de un paraguas, (otro día os diré de que se trataba).
Hoy, sacudida del todo la pereza he estado toda la mañana, juinto con Fernando
(Luces y Sombras) fotografiando la nevada y los molinos del parque eólico...ya está ,aunque tarde ya empecé el año, je, je.
Aquí Fernando, con más frío que un perro chico:

Y aquí cual Quijote contra los molinos:

Pasamos un frío de órdago. Menos mal que repusimos fuerzas calentándonos junto al fuego de la chimenea del
Castillo de Rubió, con una jarra de buen vino y unos ibéricos, que si no...